La Organización Dominicana de Estudios y Promoción de las Relaciones Internacionales (ODEPRI), está consciente que la realidad del COVID-19 es conocida de manera mundial.
La pandemia que afecta a prácticamente todos los países del mundo, incluyendo a República Dominicana, ha provocado la toma de medidas generales (establecimiento de protocolo de la Organización Mundial de la Salud) para reducir los efectos de expansión y garantizar las respuestas de los sistemas de salud de los Estados afectados.
En la República Dominicana se produjo la declaratoria de estado de emergencia en fecha 19 de Marzo 2020, con el objetivo de reducir los riesgos de contagio y tratar de minimizar los daños a la salud general y la economía de la nación.
El cierre de las operaciones estatales, cierre de empresas de manufactura, negocios privados, el distanciamiento social, etc; es parte del conjunto de recomendaciones que hablan de la forma más efectiva de reducir el contagio.
Esta condición, que sin lugar a dudas ha jugado el papel fundamental en la reducción de la pandemia, que a la fecha en el boletín número 84 del Ministerio de Salud Pública, el país supera los 21 mil casos de infectados por coronavirus, por tal razón, está en juego la salud nacional hoy en día con la apertura de las operaciones en el ámbito económico.
Aquellos países, ejemplo Chile y Brasil, que se apresuraron a reabrir en el ámbito comercial sin tener el control total del nivel de contagio, se han visto en la necesidad de hacer mayores sacrificios por cerrar tras continuar el aumento de fallecidos a causa del virus Covid-19.
Es necesario que la economía se mantenga saludable tras los efectos de la pandemia para poder continuar con un Estado en progreso, sin embargo, ni la gobernabilidad, ni la economía, ni el sueño de muchos de ver garantizados sus derechos de ser elegidos deben colocarse por encima del derecho inalienable de la vida.
La prioridad del Estado debe ser siempre garantizar la vida de sus ciudadanos. En tal sentido, la apertura de la economía debe realizarse garantizándo el distanciamiento social y respeto estricto a las medidas recomendadas por el Ministerio de Salud Pública.
Llamamos al Estado Dominicano a la sensatez para reducir la expansión de la pandemia, cumpliendo además con las observaciones del protocolo de control establecido por la OMS. Se debe evitar el aglutinamiento de personas en mítines políticos, evitar caravanas aun cuando sean en automóviles, continuar concientizando a la población sobre la importancia del distanciamiento social, como actuar cuando sea inevitable compartir en un grupo de personas porque las circunstancias así lo ameriten, todo esto a fin de preservar la salud de la ciudadanía.
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