Nos acercamos a la Pelota Invernal y es hora de tomar decisiones valientes.
La primera: deben permitirse fanáticos en el play, inicialmente en menor cantidad.
La segunda: autorizar al 30% de los negocios operar en el primer mes.
Si se aplica el distanciamiento en los bancos, farmacias y supermercados, por qué no puede ser igual en el estadio.
Esos dos renglones son fundamentales para la economía de los equipos.
Me ha extrañado que en Grandes Ligas no hayan comenzado esa desescalada. El que vaya al play debe tener mascarillas, a la entrada se le hace la prueba de la fiebre que dura 30 segundos y adentro se sientan divididos por una línea de asientos.
Cautelosos, pero tampoco con temor extremo.
Es una tragedia un juego entre Licey y Aguilas o de los dos equipos de la capital sin gente.
Espero que ponderen mi propuesta, que la hago de manera constructiva.
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